El director Hermann Bonnín y el actor Manuel Gallardo recibieron el pasado martes la distinción de Académicos de Honor en un acto que tuvo lugar dentro de la 8ª Asamblea General Ordinaria de la Academia. La entrega de las placas estuvo precedida por la laudatio de Rodolf Sirera y Nuria Gallardo, respectivamente.
La Academia entregará a lo largo de 2017 cinco distinciones más a otros profesionales destacados del mundo de la escena: Lola Herrera, Carmen Maura, José Sacristán, Ramón Ivars y Montse Amenós, que se sumarán a las ya concedidas este año a Manuel Galiana, Cristina Hoyos y Salvador Távora.
HERMANN BONNÍN
En la biografía de esta personalidad de la escena figuran numerosas direcciones de escena, interpretaciones en cine o televisión y una extensa actividad como gestor de instituc¡ones teatrales. Fue director de la Real Escuela Superior de Arte Dramático de la Generalitat catalana. También dirigió durante diez años el Institut del Teatre, donde había sido alumno.Fundó en 1997 el Brossa Espai Escénic y sigue siendo patrono de la Fundación Brossa. A lo largo de más de treinta años ha dirigido en treatro obras de Chejov, Satrindberg, Pirandello, Kafka, Maragall, Brossa o Maeterlink. Aunque su actividad principal ha sido la dirección, ha aparecido en películas como La Señora, La fiebre del oro o La ciudad de los prodigios. Es académico numerario de la Real Academia Catalana de las Bellas Artes de San Jorge.
MANUEL GALLARDO
El árbol genealógico – y teatral- de Manuel Gallardo comienza a final del siglo XIX con sus abuelos, Isidro Lechet y Victoria Ibáñez. Una de las hijas del matrimonio fue conocida en las tablas como Mery Leiva y fue la madre de Manuel. Ella lo sacó a un escenario poco después de nacer. Mary y su esposo, José Gallardo, tuvieron su propia compañía, así que las tablas fueron su destino. Desde que apareció en Cancionera, en 1937, no ha dejado de actuar, sobre todo en teatro y televisión. También trabajó en el cine en los años boyantes de las coproducciones con Italia y Francia. Ha protagonizado más de cincuenta montajes teatrales a las órdenes de los directores más prestigiosos del siglo XX. También ha desarrollado una intensa actividad sindical. Su hija, la actriz y también académica Nuria Gallardo, continúa con la saga teatral de esta familia .