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Juan Mayorga ingresa en la Real Academia Española para ocupar la silla M
19 mayo 2019
Durante la ceremonia, el académico pronunció el discurso titulado “Silencio”.

Juan Mayorga, miembro fundador de la Academia de las Artes Escénicas de España, es uno de los dramaturgos más representativos de la escena teatral española dentro y fuera de nuestras fronteras. Director de la Cátedra de Artes Escénicas de la Universidad Carlos III de Madrid, ha sido reconocido con el Premio Nacional de Teatro, el Premio Valle-Inclán, el Premio Ceres y el Premio Nacional de Literatura Dramática, entre otros.

El domingo 19 de mayo de 2019 en la sede de la Real Academia Española se celebró la solemne ceremonia de ingreso de Juan Mayorga para ocupar la silla M. Un acto al que asistió el presidente Jesús Cimarro, en representación de la Academia de las Artes Escénicas de España, así como numerosos miembros de la entidad.

 Juan Mayorga y Jesús Cimarro en la Real Academia Española 2019  Juan Mayorga y académicos en la Real Academia Española 2019

En la imagen de la izquierda, el académico Juan Mayorga junto al presidente de la Academia Jesús Cimarro. En la imagen de la derecha, el académico Juan Mayorga junto al gerente de la Academia Mariano de Paco Serrano, el académico y subdirector de la revista Artescénicas Antonio Castro, el académico y director de la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid Pablo Iglesias Simón, el académico Juan Gómez Cornejo, el académico Guillermo Heras, el académico, director de la ESAD de Sevilla y secretario general de la ADE Alfonso Zurro y la dramaturga Laila Ripoll.

 

El discurso de investidura de Juan Mayorga titulado Silencio daba comienzo así:

La situación es teatral. Lo es la división del espacio, que separa a los recién llegados de quienes ya estábamos aquí y ahora nos movemos como si hubiéramos ensayado; lo es el vestuario de los de esta parte y también, entre otros elementos de atrezo, el retrato de Cervantes a la espalda del director; lo es el silencio que ha seguido a la frase con que el director ha abierto el acto.

La situación es tan teatral que, al anticiparla con su fantasía y temiendo estropearla, quien escribió estas palabras pudo sentirse tentado, mientras las preparaba en soledad, de pedir, como acostumbra, a un intérprete que las pronunciase en su nombre. Si no se decidió entonces, ha podido hacerlo en la última hora. Hay tantos cómicos hoy en esta casa que el autor del discurso puede haber encontrado fácilmente actor o actriz dispuesta a intercambiar con él posición e indumentaria. Es muy probable, sí, que quien ahora lee o finge leer estas palabras no sea el que las escribió, sino un representante.

Ocurre además que, bajo ese tragaluz al otro lado del cual habrá cielo o ciclorama, todo se aparece con la fantasmagórica intensidad propia del teatro. Bien podría ser ese vidrio un gran foco, si no es boca de la cueva de Montesinos o de la torre de Segismundo o de la caverna de Platón. A este lado del vidrio, es fácil sentirse ficción o sueño o sombra de otro más real. Pero si realmente estamos en la Real Academia Española, yo —y con «yo» no me refiero a quien pronuncia el discurso, sino a quien lo escribió— me siento realmente feliz de hallarme aquí, y realmente preocupado. Feliz por tener el privilegio de acercarme a personas a las que acaso pueda compararme en la pasión por la lengua, no en el conocimiento de ella. Preocupado porque, además de un honor que me excede, trabajar en esta casa es una responsabilidad para la que no puede avalarme lo poco que hasta hoy he hecho, sino lo mucho que desde hoy debo exigirme [...]”

Tras pronunciar un hipnótico y revelador discurso sobre el teatro y su profundidad, Juan Mayorga finalizaba su intervención con las siguientes palabras:

Yo siento ahora tentación de fingir un blanco. Tentación de fingir que he olvidado lo que nunca he sabido. Pero más vale que simplemente me calle. No abusaré más de la vanidad de la palabra y de su paciencia. Es momento de liberarles de su silencio y de guardarlo. Muchas gracias.”

A continuación, en nombre de la Real Academia Española, la académica de la RAE Clara Janés fue la encargada de dar la bienvenida a Juan Mayorga:

Estamos aquí para dar la bienvenida al autor teatral Juan Mayorga a esta casa —sin duda también llena de ecos, ya que es la casa de las palabras—, la Real Academia Española. Esta casa que se llena de júbilo por el ingreso en ella de quien domina el verbo y sabe transmitirlo de modo que llega directo al corazón, que es el órgano que no solo acoge la palabra, sino que, según nos advertía la Chāndogya Upanishad, seis siglos a. C., es donde se forman las palabras. […] Mayorga es un maestro, no solo en vestir y desnudar la palabra, sino en dotarla de un trayecto, un acompañamiento, y un doble, y de la astucia necesaria para que, una vez dicha, se dirija a despertar aquella otra palabra no formulada, pero no menos inmediata.”

La Academia de las Artes Escénicas de España quiere transmitir su enhorabuena al académico Juan Mayorga.

 

> Texto íntegro del discurso de investidura de Juan Mayorga en la Real Academia Española, titulado Silencio.

Fuente e imagen: Real Academia Española.

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